miércoles, 4 de enero de 2012

Que viene el lobooooo!

-Que viene el lobo- dice una conocida fábula. Y en estos tiempos que corren podría terminar –bueno, pues cuando venga ya veremos lo que hacemos-.

Hace ya algunos inviernos que cada vez escucho con más frecuencia la frase “¡qué bien! 20 graditos y con sol, ya podría estar todo el invierno así” entre los pobres urbanitas que no entienden por qué ha de hacer frío y sobre todo, ha de llover y nevar en invierno. No entienden por qué no pueden disfrutar de la playa, lucir palmito, etc. en diciembre, enero o febrero pero, es curioso, a su vez tampoco entienden por qué cada día están más caros los productos básicos del campo, por qué el agua de grifo sabe peor y es más cara y, por supuesto, ni se plantean que van a conocer en un futuro no muy lejano serias restricciones, problemas de abastecimiento, encarecimiento y carencia de ciertos alimentos, etc.
Basta con salir de las ciudades y conocer un poco la vida y el entorno rural para tener conciencia del problema en términos de pasado, presente y futuro.

En un país sumido en un proceso de desertización cada vez más veloz y con la cultura instalada del “angulas para hoy y hambre para mañana” no estaría de más unas políticas revisadas, profundas y que ahondasen en la sensibilización del populacho (nosotros) a cerca de la gestión del agua: su aprovechamiento, ahorro -sobre todo-, racionalización del uso, previsión y necesidad; como fuente real de riqueza.

Qué ironía supondría la felicidad de encontrar a la gente verdaderamente triste y preocupada por la escasez de frío y precipitaciones abundantes durante los meses correspondientes.

Sería un buen comienzo.

El Listillo De Turno.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

ESCRIBE LO QUE QUIERAS. SIMPLEMENTE, NO FALTES AL RESPETO.